Con la invitación ‘vamos, niños, al sagrario’, Don Eduardo Resa, Vicario Episcopal en Melilla, indicaba a los niños que era el momento de colocarse para iniciar la procesión de entrada. Había llegado la hora de celebrar la Eucaristía y de recibir al Señor en la comunión. En una celebración sencilla y cuidada los alumnos de tercero de Primaria junto a sus padres, familiares y amigos, catequistas, profesores y Hermanas, recibieron el tercer sacramento de la iniciación cristiana.
Con el salmista cantamos en la mañana del sábado 20 de abril “¿cómo te pagaré todo el bien que Tú me has hecho, Señor?”. Y es que no podemos dejar de dar gracias a Dios por todo lo que recibimos cada día, porque todo es don, todo es gracia.
Desde el Colegio Buen Consejo agradecemos a la parroquia Sagrado Corazón su acogida, que domingo tras domingo, nos ha abierto sus puertas permitiéndonos ir creciendo en la fe con aquella comunidad. Agradecemos especialmente a Don Eduardo la ayuda ofrecida a estos niños en su proceso catequético.
Siguiendo el ejemplo de Cristo, Buen Pastor, ha animado la participación en la Eucaristía por medio de las moniciones, peticiones, acto penitencial, homilías, ofrendas,… y hasta pidiendo la colaboración de los niños como monaguillos. Y, este sábado, acogiéndoles para que recibieran la sagrada comunión, a Cristo Pan de Vida.
Recibida la bendición, los niños se consagraron a la protección de la Virgen María, Madre de Jesús y Madre nuestra, ante la Virgen de la Victoria, Patrona de Melilla.
Que la Virgen proteja a estos niños con su Corazón de Madre para que nunca se aparten de Jesús.